domingo, 23 de agosto de 2009

Ceiron

Bueno, hace un ratito me llamaste, y me dijiste que estabas triste… Te cuento que odio saber cuando te pones triste, cuando te enojas… Ya que eso tiende a hacerme enojar a mí, y a que la maquina que funciona en mi cabeza tome rumbos inesperados…

Pero esta vez, intento de no enojarme y ponerme triste, estoy buscando la manera de que vos vuelvas a tu felicidad, que estés contenta, o que por lo menos no estés mas triste…

Asíque acá me mando…

Mi memoria no es buena, tiendo a ser una persona rara, que ah mutado, y que no recuerda bien como era todo antes… Pero si logra recordar casi todo desde ese día… Un día muy extraño, un día en el que la “comenzó” a descubrir, un día en el que se dio cuenta…

Ella es la Condesa de “Selimbria”, la más bella que haya conocido, con unos ojos hermosos y grandes, unos labios enviciadores… Digna de ser vista solo por los dioses…

Aunque ellos deben de saber mejor porque fue enviada a la tierra de los mortales siendo ella inmortal…

Me presente en su palacio, con el fin de prestar mis servicios, ya que por peleas había sido expulsado del cuerpo del ejército. Ella me mostró como era, y de verdad no le temí, es mas, creo que me comenzó a gustar… Pero al fin del día, me revelo que solo seria necesario por corto tiempo, a lo que acepte de todas formas. Ese mismo día me presento donde descansaría yo, y discutimos largo sobre mis tareas… Fue raro, porque a pesar de que me gustaba, logre confesarle prácticamente todo, y creo que ella en una pequeña parte también… Las cosas no estaban bien, el mundo se azotaba en guerras, y ella se veía cada vez mas amenazada por los otros estados y quienes querían matarla…

Con todo, ella me pidió que me quedara por más tiempo del previsto, a lo que me sentí satisfecho, ya que requería de mí… Pero todo no era bueno, esa noche un grupo de desconocidos se infiltro en el palacio, hubo una gran confrontación, entraron matando a todo que se pusiera enfrente de ellos, me levante ¡exaltado! Agarre mi espada y salí a enfrentarme… Pero estaban unos pisos mas arriba, estaban por llegar a su habitación.

Subía desesperadamente, mientras iba eliminando a quienes querían enfrentarme, Salí al gran balcón y salte hasta el balcón que daba a su habitación, cuando entre ya era tarde estaba en el piso con una daga en su estomago…

La adrenalina fluyo en mi, y fue la encargada de que comenzara una gran masacre contra toda esa gente, aunque eran cientos, logre eliminar a varios, pero pronto me rodearon, estaban comenzando con mi fin…

Hasta que ella me salvo, quien yo debía proteger, quien estaba muerta con la daga clavada en el piso me salvo… Inexplicablemente comenzó a matarlos, a masacrarlos, nunca había visto a alguien asesinar a alguien de esa manera… Pronto los demás huyeron…

Lo primero que hizo luego de esa masacre fue ver como estaba…Y eso es lo último que recuerdo antes de desmayarme…

Luego recuerdo estar acostado y verla a ella a mi lado sentada… Al despertarme quise salir a caminar, ella accedió a acompañarme amablemente, pero había algo que estaba obligado a preguntarle… Y ella sin darme tiempo a que pudiera preguntarle se encargo de comenzar con su descargo…

Me confeso que era un vampiro, que no recuerda desde cuando, cree que siempre lo fue… Que alguien de su entorno se había encargado de difundirlo y por eso, era recurrente que la quisieran matar… Esto comenzaba a explicar muchas cosas… Lo bueno era que había quienes no creían esas historias… Llegamos al lago, y hay fue cuando me dijo que no me iba a necesitar mas, que iba a encargarse ella desde ese momento… Me manifesté en contra, le ofrecí seguir a su disposición sin paga alguna a lo que se negó rotundamente, estaba desconcertada… Comenzaba a creer que quizá si moría todo se acababa… Pero para mi no era así, me volví a mostrar disconforme con lo que me proponía… Le ofrecí cuidarla a cambio de nada, solo lo haría porque lo sentía, porque ella había creído en mí… Muy a pesar termino aceptando…

Hice lo que pude porque mis sentimientos no se terminen adueñando de mí, pero fracase… Hasta hoy, nunca pudieron interferir, y hoy sin dejarme reaccionar me tomaron por sorpresa y me ganaron… Me importaba de sobre manera, solo quería que este bien… Pero tengo miedo, de que mis sentimientos me confundan, de que impidan desarrollar mi labor con la templanza necesaria... Después de todo la templanza es lo que hace al caballero.

Los huelo, los siento, van a volver, pero esta vez son mas, y nosotros menos, ordeno a todos, prepararse en los puestos de batalla, vamos a pelear…voy a pelear… Saben que son más, y que la noche les juega en contra, por lo que deciden avanzar en el día, intentando encerrarnos… Pero planee esta situación, pronto dominare yo la batalla… ¡Es el momento!

Es hora de expulsarlos del palacio, es grande, pero lleno de trampas, y pasadizos que nos dan la ventaja, paso un día arduo, pero logramos expulsarlos y matar a unos cuantos, nuestras perdidas fueron mínimas, creo que aguantaremos hasta la llegada de los refuerzos…

¡BUM! La puerta trasera a la que custodiaba salio volando, sacudiéndome por los aires… ¡CONTRAATACAN! Pero… ¿Cómo pudieron entrar y sortear las defensas? Pronto encuentro respuesta Nicholas, no importa, ya es tarde, ya nos ah traicionado…

Lanzo la alerta, suenan las campanas… Pero estoy rodeado, es tarde para escapar, me pongo el casco, cierro la defensa, desenvaino mi espada, y me apronto a la batalla… Solo sin nadie que me cubra los flancos y la retaguardia, pero con el honor y la templanza que un caballero debe tener sigo firme parado…

Comienzan a avanzar lentamente, intimidados y con asombro por quien será ese ser que inmutable los espera a ellos… Los primeros son desorganizados, atacan de a uno, los mato sin ningún problema, pero poco a poco, avanzan los mas experimentados, que saben que no seré una presa fácil… No voy a morir sin presentar batalla… Sin titubear comienzo a avanzar hacia ellos, algunos retroceden asombrados, otros se afirman esperando el momento para abatirme, tiemblan los puede oler… Siquiera son capaces de mantener sus armas con firmeza, hasta un niño de 5 años, podría arrebatárselas… Pero saben que si retroceden es peor… En mi avance me deshago de los débiles, de quienes en una circunstancia desfavorable me puedan jugar en contra… Pero pronto me encuentro con caballeros experimentados, y hay es cuando todo se me puso difícil… Mi casco reflejaba, que era un buen soldado, pero eran más, y no podía dar ventajas, decidí quitarme el casco, para respirar mejor y tener un mayor campo de visión… Ese fue el principio de lo que creí seria mi fin… Logre eliminar a dos, pero luego, no pude mas, una flecha se incrusto en mi espada, atravesó mi armadura como si fuera de papel, mi espalda sangraba, sentía como si 10 elefantes me estuvieran empujando… Logre herir al tercero, pero este logro tumbarme… Y hay, es donde deje de recordar lo que sucedió…

Solo recuerdo despertar en el palacio, tendido, rodeado de soldados y de ella… La guerra había terminado, ella me salvo, nuevamente… El rey de Sirialis se hizo presente antes de lo esperado con su ejército… Sus hombres, hicieron una verdadera matanza, digna de ser recordada para la posteridad…

Pero por esas cosas de la vida, ella fue recordada como una leyenda… Pero yo y muchos mas sabemos que no fue así, yo y ustedes sabemos que su madre no es una leyenda… Su madre vive…

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